A la mierda! [Alemania]
Iba a titular esta entrada con alguna referencia a una maravillosa película que se llamó en español «La guerra de los botones», pero al final me he decidido por estampar en portada el grito de guerra de Don Fernando Fernán Gómez cuando las circunstancias lo llevaron a exteriorizar su cansancio, porque a elocuencia no le gana nada.
Bien, por si alguien no lo recuerda a estas alturas, estábamos en conflicto armado y declarado contra la FIA y sus piratas perfumados, y Ferrari la ha liado parda forzando el reglamento como acostumbra a hacer Lewis Hamilton sin que le ocurra nada. ¿No se trataba de eso, no era lo que le estábamos reclamando a la del Cavallino? Pues a falta de una taza, ¡toma dos, y bien llenas! Vamos, que me alegro de que por fin Domenicali y su equipo de estrategas hayan decidido comenzar a llenar el aire con aromas de pólvora, dejándose de hipócritas costumbres como la de recomendar a uno de sus pilotos que aplique el mapa de ahorro de gasolina.
Y hete aquí que los que pedían a voz en grito, y hace como quien dice nada, que la de Maranello se britanizara, han perdido el culo en rasgarse las vestiduras argumentando que en lo de hoy ha faltado estilo, cuando ha sido estilo británico lo que ha sobrado, puro Dennis'07 para ser más exactos.
¿Cabe mayor alegría? Pues no, no cabe, aunque sí viene al pelo un poco de lavativa conque aliviar las entrañas de los que tan bien tragan con asuntos menores como que un tipo tenga bula de por vida en McLaren o que a otro le joroben día sí y día también en Red Bull, pero con buenos modales, of course!, porque hoy Fernando ha ganado en Alemania al más tierno estilo Schumacher, el ídolo irrepetible de los ñúes, personaje que dicho sea de paso naufragaba en Hockenheim de nuevo, aunque matizaría que entre mi Felipe y Rubinho sigue habiendo un mundo, porque esta tarde el primero ha demostrado que sus reiteradas llamadas al espíritu de equipo han sido una vulgar pantomima conque enmascarar sus abundantes debilidades y carencias como deportista, y porque el viejales supo ser un caballero incluso haciendo de segundo piloto, y por ello lucha hoy con la cabeza alta, disfrutando más que entonces.
¿Y la FIA? Pues lo de siempre, para qué vamos a engañarnos si como enemigo ya ha dicho todo lo que tenía que decir esta temporada: ramplona, vengativa, cutre ante las evidencias, porque no da para más.
En la guerra y en el amor todo vale, y aunque habría preferido que Alonso hubiese sentado sus reales en Alemania de forma menos enturbiada, nadie podía imaginar que Vettel le intentara robar la cartera en la salida y de mala manera. El resto ya lo sabemos: sobre la pista dos supuestos profesionales, un tío que cobra por ganar y por liderar a su equipo, y otro que lo hace para poner palos en las ruedas de su escudería mientras sobrevive a la sombra de su compañero, y si el esquema valía y era solvente en 2002 o en 2004, no veo por qué no debe ser el idóneo cuando el beneficiado es un asturiano de corta estatura pero inmenso de genio, que de no haber sido por la estupidez de Sebastian dedo en alto, habría ganado de igual manera porque sobre el trazado alemán no ha tenido rival.
Y además, si a Lewis le va de perlas forzando y buscando los límites del reglamento, como acostumbran a decir algunos, no entiendo a cuenta de qué viene tanto lamento. ¡Buenas noches y buena suerte! Yo me voy feliz a la cama.