No me deja ver toda la noticia pero seguro que la periodista no se ha pasado por este hilo antes de publicar jeje
Autopromoción o la moda de crear tu propia vivienda ladrillo a ladrillo: "Te ahorras dinero, sólo tienes que mirar los precios en Idealista"
La fiebre inmobiliaria ha azuzado también esta alternativa que permite a los futuros propietarios construir la casa a su gusto y a precios más atractivos, aunque con más quebraderos de cabeza
Raúl Álvarez, en la parcela donde comenzará a construir su futura vivienda.ANTONIO HEREDIA
PREMIUM
Actualizado Sábado, 19 febrero 2022 - 22:32
Cuenta
Hilario de la Mata que fue justo un año antes de la pandemia cuando dos personas se acercaron por la urbanización al percatarse del elevado número de parcelas que había. Hablaron con los propietarios y adquirieron varias de ellas en cuestión de semanas; unificaron los precios al alza y hoy en día las han vendido prácticamente todas. Casi no se les ha vuelto a ver por la zona donde antes eran habituales. En su lugar, han comenzado a proliferar
los albañiles, carretillas y empresas de construcción encargadas de levantar los chalés y casas de los futuros vecinos.
La escena ocurre en una de las urbanizaciones que poco a poco,
ladrillo a ladrillo, empiezan a tomar forma alrededor del pantano de
Entrepeñas (Guadalajara), una zona que en los últimos años y especialmente a raíz de la pandemia se ha convertido en uno de los mejores ejemplos del auge de la última moda en materia de vivienda:
la autopromoción o el arte de levantar tu propia casa desde cero, a tu gusto y sin intermediarios.
El propio Hilario optó por esta alternativa hace tres años. Compró una parcela de 1.000 metros cuadrados y construyó una vivienda de 160 metros cuadrados, garaje y tres habitaciones.
"Me he construido la casa de mis sueños", presume enérgico. Ese fue el principal motivo para iniciar todo el proyecto. "Visitaba habitualmente la zona y quería tener casa aquí. Las pocas viviendas construidas que había tenían un precio más alto del que quería pagar y no encontraba nada que se ajustase lo que buscaba". Hizo cálculos, localizó una parcela a "muy buen precio" y
tiró de amigos que se dedicaban a la construcción y las reformas. El resultado es "en un 95% como la había planificado". Tan satisfecho está con el resultado, que ahora se plantea repetir experiencia en la misma zona al ver la elevada demanda y la rentabilidad que deja el alquiler; su mayor freno es el precio de los terrenos, que
han pasado de 18.000 hasta 26.000 euros, "y algunos, los mejores, se colocan en 60.000 euros".
La posibilidad de personalizar la vivienda es la razón que más se repite entre quienes optan por la autopromoción. Elegir la distribución, los materiales, las calidades o los acabados son argumentos de mucho peso, incluso aunque el proceso pueda volverse largo y por momentos complicado. Lo sabe bien
Raúl Álvarez, madrileño a la espera de obtener la licencia del ayuntamiento de
Torrelodones para poner en marcha los cimientos de su futuro hogar. "La principal ventaja es que vamos a tener una casa tal y como la queremos", cuenta entre ilusionado y resignado.
Vivienda de Hilario en el pantano de Entrepeñas (Guadalajara).E. M.
Su mujer y él buscaban un estilo de vida menos urbano y más cercano a la naturaleza, así que compraron una parcela de unos 500 metros cuadrados el pasado mes de junio. Para entonces ya tenían localizada la promotora con la que harían el proyecto, en su caso, una casa de construcción prefabricada en hormigón.
"Espero celebrar en ella el próximo San Valentín", dice el 14 de febrero de este año.
Esa misma promotora ya les avanzó en septiembre que aumentaría un 10% el presupuesto inicial al repercutirles el aumento de los precios de los materiales. "Subestimar la dificultad de la autopromoción es un error muy habitual", apunta
Sonia Bentué, directora comercial de
Unlatch, una herramienta digital que simplifica el proceso de venta de inmuebles.
Los problemas aparecen casi desde el primer momento, con la compra de suelo, que no suele estar financiada por los bancos y exige que el futuro propietario disponga de ahorros propios para arrancar el proyecto. "A partir de aquí, la dificultad de la gestión es grande por la tramitación con las administraciones, la contratación de técnicos, el pago de impuestos, la financiación y la contratación de la construcción, que requerirán una gran inversión de tiempo y trabajo. Existen empresas que nos pueden ayudar en todas estas gestiones, pero se llevarán parte de lo que habíamos ahorrado por los costes del promotor", apunta
Jordi Peñas Padilla, socio fundador del Estudio 7Dos, Arquitectos.
Alegrías y complicaciones
El precio es otro de los atractivos que, a priori, hace ganar enteros a la autopromoción, aunque no siempre es tan económico como se espera. "Que sea más barato construir tu propia casa que adquirirla lista para entrar depende de muchos factores y de las necesidades del propietario. Sobre el papel, la reducción de intermediarios puede suponer un ahorro de costes, pero también hay que tener muy presente que esta iniciativa exigirá por parte del propietario una mayor implicación, y lo que es más importante, conocimientos suficientes del proceso constructivo para poder llevarlo a cabo con éxito y evitar sobresaltos e incidencias", advierte
Ernesto Ferrer-Bonsoms, director de Real Estate de Intrum España y director de negocio de
Solvia.
Sobre el papel es muy bonito, pero luego hay que llevarlo a la realidad. Tienes que estar pendiente de todo, plantearte todo, desde los enchufes hasta el último rincón que quieres hacer, cosas que ni te imaginas que pueden surgir
Juan Carlos Recio
Sin conocerlo, Ernesto describe casi al milímetro la experiencia de
Juan Carlos Recio, madrileño con un chalé ya construido, también en
Torrelodones, a apenas 5 minutos caminado del futuro inmueble de Raúl. "A mi mujer le gusta mucho el diseño y siempre había tenido la ilusión de hacerse su propia casa". Empezaron su proyecto en 2017 y pusieron el último ladrillo en julio de 2020, en plena pandemia.
"Sobre el papel es muy bonito, pero luego hay que llevarlo a la realidad", rememora. Y la realidad en su caso fue un proceso largo y lleno de complicaciones. "Tienes que estar pendiente de todo, plantearte todo, desde los enchufes hasta el último rincón que quieres hacer, cosas que ni te imaginas que pueden surgir".
A día de hoy, asegura, se sigue "peleando" con la constructora por pequeños fallos que se encuentra en la ejecución. Aun así, tanto él como su pareja consideran que los desvelos merecen la pena, aunque sólo sea por los efectos en el bolsillo.
"Te ahorras dinero, sólo tienes que mirar los precios en Idealista", asegura.
Aumento de la demanda
La demanda y los precios de los suelos aptos para autopromoción se han disparado al mismo tiempo que las ventas de unifamiliares y chalés han vaciado el
stock de este tipo de viviendas en el mercado. Según los datos del
Consejo General del Notariado, las operaciones sobre viviendas unifamiliares crecieron un 37,8% en 2021 respecto al año anterior, mientras que su coste subió un 10,2%,
hasta los 1.195 euros por metro cuadrado de media.
La pandemia desató el deseo de muchas personas por vivir en lugares más amplios, con más luz y más alejados de las grandes congestiones urbanas. En Torrelodones, según cuenta Juan Carlos, se aprecian claramente los efectos de esos cambios. "Ha habido un boom de autopromoción y en mi zona se ve claramente porque hay
hileras de chalés y cada uno tiene una forma y un diseño distinto", apunta.
Manuel y Maika llevaban años intentando vender una parcela en
Robledo de Chabela (Madrid). La habían comprado antes de 2008, pero como finalmente no construyeron nada en ella, decidieron ponerla en el mercado. Nadie había contactado con el matrimonio durante años, hasta que hace unos meses un comprador les llamó, les presentó una oferta en firme y en cuestión de días cerraron el trato.
"Este tipo de suelos suelen estar disponibles en zonas próximas a las ciudades, pero algo alejadas de los centros, y donde vemos que hay más oferta es en zonas rurales y poblaciones más pequeñas", anota Ernesto Ferrer-Bonsoms; asegura también que en Solvia cuentan con una mayor oferta en
Castellón, Guadalajara, Burgos, Tarragona, Barcelona, Girona o Toledo, y que la demanda y la autopromoción irán en aumento. "Por un lado, porque muchas empresas han asumido el modelo híbrido como algo estable, lo que permitirá disfrutar de las segundas viviendas más allá de los periodos vacacionales. Y, por otro, porque el deseo por adquirir un inmueble unifamiliar, ya sea chalé o adosado, seguirá creciendo".
Lo más complicado en cualquier caso es la financiación: los bancos no conceden hipotecas para la compra de terrenos, como mucho,
hipotecas de autopromoción que, como su propio nombre indica, permiten financiar la construcción de la vivienda. "Sólo cuando compras el terreno, la entidad se sienta a hablar contigo", confirma Raúl, que confía en que ese momento también esté próximo para él.
COMENTARIOS
1. Compramos una parcela en un pueblo se la sierra de Madrid en febrero 2021, tenemos todo, proyecto del arquitecto, certificados del ayuntamiento y lo más importante el dinero, buscamos constructora y nos dan tres años de espera y sin presupuesto firme por la situación de faltas de materiales. Presupuesto aproximado, de alguno que se atreve, de casi el doble de lo presupuestado por el arquitecto. No es tan fácil, ni mucho menos tan barato
2. Compré un terreno en Madrid capital en 2018, empecé los trámites ese mismo año, estamos en 2022 y estoy a la espera de unos detalles para poder entrar a vivir en la casa... Cuidado con las hipotecas autopromotoras, el sistema de pago contra certificación, el periodo de carencia, los plazos de ejecución, los impuestos a los que te vas enfrentando de los ayuntamientos, los problemas de todo tipo con fianzas y sus devoluciones, empresas como el Canal de Isabel II, imprevistos y desvíos.... aparte de tener que tener el terreno comprado y pagado, que es una condición indispensable para acceder a una hipoteca autopromotora, recomendaría tener al menos un cantidad que ronde el 25% o 30% del proyecto de ejecución para poder afrontar todo tipo de imprevistos que uno ni piensa que van a aparecer. Es una apuesta muy interesante y satisfactoria pero no está exenta de riesgos que pueden complicar la estabilidad financiera y emocional.
3.Volvemos a urgir a los Ayuntamientos a que su deber es preservar al máximo en la medida que puedan la tranquilidad y el descanso de sus ciudadanos que VIVEN en sus ciudades. Tiene que haber una ORGANIZACIÓN a la hora de distribuir permisos para construir. NO PUEDE SER ciudadanos que tengan la mala suerte de encarrilar de seguido varias obras en tres o cuatro años seguidos de vecinos de alrededor. Se dan casos de gente que se tira con un/unos vecino/s cuatro años de obra con ruidos insoportables. Y han de regular de forma nítida, con conocimiento de la policía un HORARIO DE DESCANSO, no puede haber ruido de 14:00 a 16:00 ni después de las 20:00. Y basta ya de SOPLADORAS.
4. Por mi experiencia, cuando construyes una casa siempre piensas que te va a salir más barato y que va a ser a tu gusto y la realidad es que ninguna de esas ideas se cumple. Los costes reales se disparan, luego vienen los "posyaques" y constructor y arquitecto no hacen más que poner pegas a todas tus propuestas.
5. Vamos a ver, hay pocos materiales y además carísimos ¿y ahora te vas a poner a construir?
6. La autopromoción exige dedicación, esfuerzo, ilusión y buen asesoramiento con técnicos de confianza pero....hacerse la casa a la medida y al gusto y necesidades de cada uno compensa de lejos ya que forma parte de tu vida.
En Suiza no es nada raro que las urbanizaciones y comunidades de vecinos prohíban durante el fin de semana cortar césped y barbacoas; incluso durante la noche usar el coche y tirar de la cadena. Tal vez no tanto, pero en España debería empezar a regularse más el asunto de los ruidos. Eso sí que es eco y salud.
7. Sigue la máxima, por mucha propaganda que hagan, de que no se atan perros con longanizas.