Así de extraño y simpático era el "Allard Clipper", un microauto británico de tres ruedas que parecía sacado de una caricatura... ¡pero era 100% real!
Diseñado en 1954 por Sydney Allard, este auto tenía una misión clara: ofrecer una alternativa económica y liviana para las familias de la posguerra. Pero… entre fallas técnicas, problemas de producción y una apariencia tan particular que causaba más risas que respeto, todo salió mal
Solo se fabricaron alrededor de 20 unidades, y muchas terminaron destruidas o olvidadas. Sin embargo, fue uno de los primeros autos británicos con carrocería de fibra de vidrio, algo revolucionario para la época
El acceso era por la parte trasera, tenía un solo faro central (aunque algunos modelos lo modificaron), ¡y solo podía llevar a dos adultos y un niño muy optimista!
Una rareza absoluta que hoy es una joya de museo para fanáticos del diseño retro y los microcoches.