Fotos Los cabrio más raros del mundo: aún más rarezas VOL II

Que curioso, y el amarillo de atrás también debe ser un cabrio raro

 

Me lo temía, me han despistado los reposacabezas de la banqueta trasera.

 

Alfa Romeo 33

 

El único Testarossa Cabrio, es una preparación para el anuncio de Pepsi con Michael Jackson, y por cierto también es de la primera serie con un solo retro, muuuy bonito

 

El anuncio



Más largo

 

Chevrolet Corvette Stingray ZL-1 Convertible: una joya única


30/12/2022



La historia del Chevrolet Corvette es muy dilatada, hay pocos coches americanos con tanta solera. El número de versiones que ha tenido el «Vette» en sus casi siete décadas es prácticamente incontable. Lógicamente, hay algunas que son más especiales que otras y hoy conocemos una de las que estarían en el podio de la exclusividad. El Chevrolet Corvette Stingray ZL-1 Convertible está considerado como casi un unicornio dentro de la gama del deportivo por razones evidentes, así que vamos a dar un repaso a su historial.


Hay que empezar diciendo que solamente se hicieron dos unidades de este ejemplar y que una de ellas será subastada por parte de RM Sotheby’s el próximo mes. Es una ocasión casi única para que un coleccionista se lleve uno de los Corvette más buscados, que nació en 1969 como una opción casi única, un o de los primeros RPO (Regular Production Option) de GM en la época. En la fábrica de St. Louis se hicieron estos dos ejemplares como una especie de experimento para la homologación de la FIA/NHRA, aunque la finalidad no era su venta al público.



La principal diferencia respecto al resto era que este Chevrolet Corvette Stingray ZL-1 Convertible montaba el motor L88 V8 de 427 pulgadas cúbicas (7.0 litros) de la marca. Hablamos de un bloque hecho íntegramente de aluminio y que contaba con modificaciones importantes para elevar su potencia hasta los 560 CV en la versión de cámara abierta. Curiosamente, esta versión con el motor de aluminio costaba 4.718 dólares más que el de serie y encima no recibía otras opciones como la radio, la calefacción, el aire acondicionado, las ventanas eléctricas o la dirección asistida.

Todo estaba llamado a maximizar su rendimiento y eso fue lo que llamó la atención de John W. Maher de Leechburg, el único cliente que pudo llevarse el Chevrolet Corvette Stingray ZL-1 Convertible en su momento. Sus conexiones influyentes hicieron que se le permitiera comprar ese vehículo con nº de chasis 194679S710209 y transmisión automática M40, terminado en el llamativo color Monaco Orange. Fue en agradecimiento a la ayuda que le brindó Grady Davis, bicampeón de la SCCA y videpresidente de Gulf Research. Por supuesto, serviría como base para una librea de Gulf.


El Chevrolet Corvette Stingray ZL-1 Convertible fue entregado en febrero de 1969 y durante los primeros años sirvió para que Maher demostrase sus dotes en la competición. Con una preparación ejemplar se enfrentó a todo tipo de pruebas en Estados Unidos. Incluso se le sustituyó el motor (bajo garantía) después de algunos problemas mecánicos. En 1972 fue jubilado de las carreras y atravesó un periodo de inactividad hasta 1989. La intención era volver a la pista y recibió una restauración por parte de Bill Andrejko Auto Restorations.


Durante los siguientes 15 años, Maher lo estuvo utilizando bastante en exhibiciones y concursos, convirtiéndolo rápidamente en uno de los Corvette más laureados del país. Le tuvo que doler cuando en 2007 se desprendió de él, después de casi cuatro décadas. El nuevo comprador también le dio su valor con una restauración del reputado Corvette Repair Inc. de Kevin Mackay, el más importante para este modelo.




Lo cierto es que el vehículo había estado bien conservado y apenas se le tuvo que restaurar los componentes que más desgaste del tiempo presentaban. En 2014 recibió la la certificación Bloomington Gold y fue reconocido formalmente como el primero de los dos Chevrolet Corvette Stingray ZL-1 Convertible que salieron de fábrica. Sigue en condiciones óptimas y ahora se ofrece en subasta por primera vez. Por ello se espera que alcance un precio de entre 2,8 y 3 millones de dólares, una auténtica joya.

Fuente: RM Sotheby’s

 

Studebaker Avanti: el americano que rompió todos los récords

01/01/2023









Hay cierto halo de admiración alrededor de los coches americanos de hace unas décadas. Algunos nombres están muy claros, aunque esta vez hemos querido bucear en algo menos conocido, pero igual de sorprendente. Hablamos del Studebaker Avanti, un coupé que estuvo a la venta de forma limitada entre 1962 y 1963. A pesar de su corta vida, le bastó para batir hasta 29 récords mundiales de velocidad en Bonneville Salt Flats. Un ejemplar que se resistió a morir y que algunos siguen recordando actualmente.

Presentado como un coche de «la era espacial» y como el vehículo de producción más rápido del mundo, el Studebaker Avanti ganó popularidad rápidamente en su presentación. Se trataba de un coupé de dos puertas y cuatro plazas con un aspecto inusual que era obra del diseñador, Raymond Loewy. Llamaban la atención sus líneas fluidas, la ausencia de parrilla, sus faros circulares o la generosa superficie acristalada. Su carrocería estaba hecha de fibra de vidrio para mantener un peso muy contenido.



Que no tuviera parrilla no quería decir que fuera justo de refrigeración. Contaba con un respiradero inferior» para llevar aire al compartimento del motor. Por cierto, inicialmente era el Studebaker 289 Hawk V8 de 4.7 litros, que podía ir ligado a una caja de cambios manual de tres velocidades o a una automática de cuatro relaciones. En el R1 de lanzamiento conseguía 240 CV de potencia, pero luego llegó un R2 con sobrealimentación Paxton que llegaba hasta los 289 CV. Y también hubo un R3 que alcanzó los 335 CV y rompió todos los récords de la época.

Porque, el Studebaker Avanti consiguió una velocidad máxima de 274.95 km/h en el año 1962, una marca que dejó a muchos boquiabiertos. Su rendimiento se conseguía, en parte, por haber mantenido su peso en unos nada despreciables 1.440 kg. Para soportar esas prestaciones se le instalaron unos frenos de disco delanteros (los traseros eran de tambor), siendo el primer modelo de producción estadounidense en ofrecerlos.



Pero los problemas financieros llegaron a Studebaker y tuvo que cerrar la fábrica donde se producía el Avanti. Entre 1962 y 1963 apenas les dio tiempo a hacer 5.800 unidades del aclamado coupé. De hecho, posteriormente en 1966 la firma terminaría de desaparecer para siempre. Sin embargo, algunos entusiastas quisieron que este modelo sobreviviese. El distribuidor Newman & Altman compró los derechos y el espacio de la fábrica para resucitarlo. Lanzaron un Avanti II y a lo largo de los años lo fueron modificando, pero nunca volvió a ser igual…

 

Python (1 de 12) con base Mustang, fue un proyecto como posible sucesor del AC Cobra de Carroll Shelby

 

Ferrari F8 Spider en el color narana de Lambo Arancio Borealis, pintado original en fábrica con el programa Ferrari Tailor Made

 

Tesla Roadster TAG Heuer, un ejemplar único

10 febrero, 2023


A falta de la llegada del Tesla Roadster moderno, al que se le lleva esperando varios años, recordamos al Tesla Roadster TAG Heuer, un ejemplar único basado en el original, presentado en el Salón del Automóvil de Ginebra de 2010 y creado para para celebrar el 150 aniversario de la relojera suiza.

El Tesla lucía un diseño exterior exclusivo, con la carrocería cubierta principalmente en dos tonos de gris, con el más oscuro como color principal y ciertas secciones en uno más claro, en las que además se pueden apreciar ciertos mecanismos internos propios de un reloj.

La nota llamativa la ponen los dos colores característicos de la marca, el verde y el rojo que aparecen en su logotipo. El primero está presente en el lado derecho del eléctrico y el segundo en el izquierdo, dando forma a las carcasas de los retrovisores, a una fina línea que recorre la carrocería, al perfil de las llantas (que son negras) y a las pinzas de freno.



El interior también era específico, en el que el diseñador jefe de Tesla, Franz von Holzhausen, integró elementos de diseño de TAG Heuer, destacando sobre todo la consola central, inspirada por un reloj conceptual que la firma presentó por aquel entonces.

El coche iba a acompañado de un teléfono móvil TAG Heuer Meridiis y por un cronómetro TAG Heuer de movimiento mecánico y edición limitada con una precisión de un quinto de segundo. Según la compañía, rendía homenaje a la fundación de la empresa en 1860 y al renacimiento de los cronómetros antiguos de la marca.



En su presentación, Jean-Christophe Babin, presidente y director ejecutivo de TAG Heuer, declaró lo siguiente: “TAG Heuer tiene una rica historia y experiencia con los equipos de carreras más prestigiosos del mundo, pero esta es la primera asociación que hemos forjado con una compañía de coches deportivos eléctricos. Creemos que los conductores de alto rendimiento buscan cada vez más productos que sean eficientes, socialmente responsables y con estilo. TAG Heuer y Tesla son dos de las pocas empresas que ya están logrando estos ideales en la actualidad”.

 

Aparte del marronazo del conductor, lo más heavy es que han hecho un julai cabrio a pelo, le han metido la radial y ni capota, ni refuerzos ni hoxtias...

 

La primera vez que lo veo:
El BMW Isetta spiaggia Custom Roadster fue un microcoche construido bajo licencia en Alemania desde abril de 1955 hasta 1962.

 

Que guapa la conversión , sin puerta delantera y con asientos de mimbre, como el 500 Jolly Beach

 

Este ha hecho como el julai de @Gus , pero con una radial virtual, que guapo

 

Ferrari Dino 246 GTS color Rosso Córdoba Metallizato, solo hay 51 pero este además fue propiedad de Laetitia Casta y lleva acabado Chairs & Flares, con asientos Daytona, pasos de rueda ensanchandos con llantas Campagnolo, muy bonito