La movida es esa. Y mira que tenemos la lección bastante próxima en el tiempo con la famosa “primavera árabe”.
Si lees sobre el Iran de los 70, con esas fotos tan chulas de tías en la playa, descubres que en realidad solo eran las élites sociales las que aceptaban la occidentalizacion. En los pueblos, en las mezquitas, en las casas de los currelas… ahí la película era completamente disntinta.
El choque cultural entre occidente y el Islam es frontal y milenario. No se cura con injertos democráticos ni, como hemos visto muchas veces, con bombas.
Ojo, que ni p*tas ganas tengo yo de que Irán tenga armas nucleares y personalmente estoy a favor de sacar del poder a toda esa gentuza; pero no seamos ingenuos. Irán no va a ser una democracia occidental jamás, o al menos esa es mi opinión desde la barra del bar.