Lamborghini Temerario: bendita electrificación
Joan Dalmau
22 de julio de 2025
Lamborghini ha presentado de manera dinámica en el circuito de Estoril
su nuevo Temerario, su coche "pequeño" dotado de un nuevo chasis de tipo space frame de aluminio y
un sistema de propulsión híbrido que combina un nuevo motor V8 de gasolina biturbo
capaz de girar hasta 10.000 rpm con tres motores eléctricos. Lamborghini ya acepta pedidos a
un precio que arranca en poco más de 315.000 euros.
La gama “pequeña” de Lamborghini se apoyó, en las dos generaciones precedentes,
en el trabajo conjunto con Audi y sus R8, pero ahora el R8 ya no existe y
el Temerario es un producto 100% Lamborghini con el que la marca completa la electrificación de su gama tras el lanzamiento del
Revuelto y del
Urus SE. De momento, Lamborghini no entra en los superdeportivos eléctricos puesto que, según los responsables de la marca, no hay todavía un mercado para ellos.
El Lamborghini Temerario es un coche completamente nuevo que estrena chasis de aluminio y motor V8 híbrido biturbo.
Las claves del sistema híbrido del Lamborghini Temerario
- V8 de gasolina biturbo de 4.0 litros
- Potencia del motor de gasolina de 800 CV a 9.750 rpm
- Potencia conjunta de 920 CV con tres motores eléctricos
- Caja de cambios automática secuencial de doble embrague
El motor V8 biturbo es completamente nuevo.
Tiene 4 litros de cilindrada, 800 CV de potencia a 9.750 rpm, un par de 730 Nm y lubricación por cárter seco. Cigüeñal plano, bielas de titanio y pistones de aleación de aluminio fundido vienen directamente de los motores de competición. Los dos turbos, de gran tamaño y que
soplan a un máximo de 2,5 bar, van metidos dentro de la V que generan los cilindros. La transmisión,
automática pero con modo manual secuencial mediante unas enormes levas tras el volante, es de
8 relaciones de doble embrague.
El Lamborghini Temerario tiene tres motores eléctricos, uno trasero y otros dos en el eje delantero en complemento del de gasolina de 800 CV.
Para complementar al motor térmico, que va, como siempre, en el centro del coche, hay
tres motores eléctricos, uno de ellos entre el motor de combustión y el cambio y
otros dos en el eje delantero, moviendo cada uno, una de las ruedas delanteras.
La potencia máxima conjunta es de 920 CV, que no son pocos. La
velocidad máxima es de 340 km/h. El Temerario acelera de 0 a 100 km/h. en 2,7 segundos y de 0 a 200 en 7,1 y frena de 100 a 0 en 32 metros.
Tanto en chasis como la carrocería de este coche son de aluminio, no de carbono. Costes al margen, el aluminio permite mantener el peso en cifras lógicas y
ha mejorado en un 24% la rigidez con respecto del Huracán.
El Temerario mide 4,70 metros de largo por 1,99 de ancho (2,24 con los espejos desplegados) y 1,20 de alto y su distancia entre ejes es de 2,65 metros.
Los neumáticos Bridgestone Potenza Sport y Corsa se han desarrollado en exclusiva para este coche y los frenos de serie son carbonocerámicos.
Este coche monta
neumáticos Bridgestone Potenza desarrollados en exclusiva para él. Pueden ser Potenza Sport o Corsa, estas últimas con menos dibujo (la parte interna de la banda es slick puro).
Las llantas delanteras con de 20 pulgadas y las traseras de 21 y en la versión Allegerita, que es más ligera y con una orientación más hacia el uso en circuito, pueden ser de carbono. Tras ellas asoman los
discos carbonocerámicos CCB Plus con pinzas monobloque de 10 pistones apresando unos discos de 410 mm y de 4 pistones para 390 mm de disco detrás.
Prueba del Lamborghini Temerario en Estoril
Probamos el coche en el circuito de Estoril,
primero en mojado y luego ya en seco, en dos series, una de cuatro vueltas y otra de seis. En mojado y con los Bridgestone Potenza Corsa tuvimos que tener cuidado. S
on neumáticos muy de seco, así que usamos el modo Strada, de carretera, que es más suave en la gestión de la potencia. De todas maneras pudimos empezar a tomarle el pulso al coche y a comprobar la eficacia de la tracción integral y la potencia del sistema de propulsión híbrido.
El circuito de Estoril fue el escenario perfecto para disfrutar de la conducción del Lamborghini Temerario.
La diferencia
entre el modo Strada (carretera) y el modo Sport se nota poquito. Debería notarse más. Hay una pequeña diferencia de entrega de potencia, pero mínima.
Pasamos al modo Corsa que es el más adecuado para circuito. En este el cambio del mapeado de motor y cambio se nota bastante más.
Además de los modos City, Strada, Sport y Corsa, con otro de los mandos del volante
elegimos la incidencia de la electrificación entre las opciones Hybrid, que busca una combinación de los motores para reducir el consumo, Recharge, que mantiene la batería siempre cargada, aunque lo cierto es que no se descarga nunca porque el motor de gasolina la recarga constantemente cuando con basta con las regeneraciones y frenadas y
Performance, en el que los motores eléctricos trabajan para conseguir las prestaciones máximas.
El Lamborghini Temerario acelera de 0 a 100 km/h en 2.7 segundos y se planta en 200 en 7.1
En pista, las sensaciones son brutales.
Se juega mucho con la segunda y la tercera en las curvas lentas y se acelera mucho a la salida. La aceleración del coche es brutal gracias al apoyo de los motores eléctricos y a lo que duran las marchas. Cuando tienes la sensación de que ya debes cambiar, echas un vistazo al régimen y
te das cuenta que estás en 7.000 y que aún puedes seguir acelerando otras 3.000 revoluciones. Es increíble la sensación de apurar las marchas hasta ese límite, así como la velocidad con que el motor incrementa su régimen de giro.
No es solo que llegue a 10.000, sino lo rápido que llega.
La última tanda la dimos con la versión Allegerita. Las diferencias de esta última no se limitan a la estética.
Pesa 25 kilos menos porqué lleva llantas de carbono, asientos más ligeros, contrapuertas simplificadas y una serie de cambios en el spoiler delantero, las taloneras, el capó del motor y el alerón trasero, todas piezas en carbono. El resultado es
un apoyo aerodinámico mayor en la parte trasera y ese menos peso comentado.
La clave del Lamborghini Temerario está en la electrificación
El motor V8 biturbo del Lamborghini Temerario es capaz de girar a 10.000 rpm, algo insólito en un turbo de serie.
Hay muchas maneras de usar la hibridación y la que ha usado Lamborghini es la mejor. Ha buscado las prestaciones puras. El motor es biturbo, pero Lamborghini ha conseguido algo inédito: no solo saca 800 CV (que son doscientos por litro, una barbaridad para un coche de serie) sino que lo hace girar a 10.000 rpm. Al acelerar, el motor eléctrico que está entre el de gasolina y el cambio
le mete 300 Nm desde cero y con eso se consigue que la reactividad al acelerador sea inmediata. El turbo ya entrará y da un poco igual cuando lo haga.
Luego hay otros dos motores eléctricos delanteros, cada uno para una rueda. Es, en primer lugar
un sistema para salir del parking en modo eléctrico. No se busca hacer kilómetros sino, simplemente salir del parking y de hecho, la autonomía no llega a 10 km en modo 100% eléctrico. Lo que se busca con esos motores es
dar un plus de 120 CV en conducción deportiva y en circuito. Cuando hace falta que tiren las ruedas delanteras, ahí están para hacerlo. Es un coche de tracción integral con esos dos motores que, además, tienen la misión de que el coche no subvire.
Es alucinante como entra el Temerario en las curvas, haciendo honor a su nombre.
No hay atisbo de subviraje, incluso si te pasas un poco frenando tarde, el coche entra. Por lo tanto, aquí la electrificación
busca obtener el mejor comportamiento dinámico y tenemos en un único sistema las ventajas del eléctrico hasta 3.000, las del turbo de 3.000 a 6.000 y luego no se acaba porque sube a 10.000 vueltas con lo mejor de un atmosférico.
Eso es un aprovechamiento inteligente de la electrificación.
La combinación del motor de gasolina y los tres eléctricos (hasta 150 Cv el trasero y hasta 120 los dos delanteros) permiten prestaciones increíbles.
En el sistema eléctrico, el tope lo pone la batería.
Ésta es de 3,5 kWh y puede cargarse mediante una toma externa, con las desaceleraciones, que en un coche así son brutales, y con el uso del motor de gasolina.
La batería puede dar un máximo de 140 kW, es decir, 190 CV que deben repartirse los tres motores de 110 kW cada uno, o sea, 150 CV. Así, la centralita de gestión del coche es la que
decide qué motores y con que potencia actúan en cada ocasión.
El motor eléctrico situado entre el de gasolina y el cambio permite ese plus de par al acelerar que ya hemos comentado consiguiendo así que no se note el tiempo de respuesta del turbo y
se consiga una aceleración progresiva. Además, este motor se encarga de
poner en marcha el de gasolina y de equilibrar el coche en las frenadas ya que es su inversión la que inicia la frenada del vehículo generando freno motor en el momento en que se levanta el pie del gas.
En este coche
no se puede variar la fuerza de regeneración ya que es el calculador el que decide la que aplica. Los dos motores sobre el eje delantero se utilizan de dos maneras diferentes:
para aportar tracción al eje delantero cuando estemos, por ejemplo, en circuito o sobre firme deslizante o
para la función de vectorización del par, que busca eliminar el subviraje. En el eje trasero, el motor eléctrico también aplica par extra a la rueda que más lo necesite en curva, de modo que el giro del coche es prácticamente perfecto en todo momento.
Modos Drift y Launch Control del Lamborghini Temerario
El modo Drift permite derrapar con el Lamborghini Temerario, pero manteniendo el control del piloto sobre el coche.
Además de los modos antes citados,
el Temerario tiene un modo drift y otro para el launch control. Ambos los probamos en Estoril. El modo drift no deja de ser un divertimento y hay que hacerlo en pista cerrada. Incide sobre el rendimiento del motor y sobre el sistema de dos motores eléctricos delanteros que en lugar de facilitar la entrada en curva facilitan que se vaya de atrás.
Hay tres niveles y afecta al control de estabilidad que deja un margen mucho mayor antes de entrar en acción. Se notan los distintos niveles y es más fácil controlarlo en el nivel 3 porqué el deslizamiento es más evidente y el coche deja más tiempo al conductor antes de que el ESP actúe.
Este modo drift no tiene nada que ver con el de otros coches como, por ejemplo, el último Focus RS en el que se bloquea el diferencial delantero de manera electrónica
para que una rueda empuje y la otra esté quieta, de modo que se pueden hacer dónuts sin tener ni idea de hacer derrapar un coche. En el Temerario, el torque vectoring delantero, cuando esté el modo Drift insertado,
provoca el inicio del deslizamiento de la parte trasera al soltar el gas y entonces, al presionar el acelerador se driftea con mayor facilidad ya que el coche ha iniciado el movimiento. Pero claro,
el conductor debe, a continuación, saber controlar el coche a base de gas y de contravolante, de lo contrario hay trompo seguro.
El sistema Launch Control del Lamborghini Temerario garantiza aceleraciones perfectas. El conductor solo debe agarrar el volante.
Por lo que respecta al Launch Control
hay que activarlo con el modo Corsa y confirmarlo. Luego, hay que frenar con el pie izquierdo y acelerar a fondo con el derecho. Al soltar el freno, el coche sale literalmente disparado en busca de esos 2.7 en el 0-100.
De cambiar de marcha a 10.250 rpm, más allá del corte habitual, se encarga el propio coche. Es alucinante el launch control en aceleración. Hay pocos coches en los que sucede que cuando aceleras sientes algo en la parte baja del estómago. Se nota en los que aceleran en menos de tres segundos y en este se nota.
El precio del Lamborghini Temerario
El precio de salida de este coche en Italia es de 315.000 euros, una cifra elevada, pero de acuerdo con la altísima tecnología que ofrece. La marca, ademas, ofrece innumerables opciones de personalización, entre ellas,
400 colores diferentes y no es raro, ya que 9 de cada 10 clientes de Lamborghini apuestan por el programa de personalización que ofrece la marca.
En el diseño destaca el nuevo lenguaje, muy condicionado por la aerodinámica y
con las formas hexagonales que encontramos en las luces de día, los pilotos traseros y el marco del escape como elemento que da continuidad al diseño. Las distintas tomas de aire, para canalizarlo y
refrigerar motor, radiadores y frenos, están perfectamente situadas y apenas afectan a unas líneas muy puras y con grandes apéndices que afearían el conjunto.
El Temerario es, posiblemente, el Lamborghini con un habitáculo más cuidado hasta ahora en la marca.
En el habitáculo, se ha puesto especial empeño en que
el coche sea lo más habitable posible. Hay dos asientos disponibles, los de confort, eléctricos y los deportivos, más ligeros del "Alleggerita" con carcasa de carbono y regulación manual. El conductor dispone de dos pantallas,
la de la instrumentación y una central vertical para el clima, el teléfono, el navegador y otros widgets de información, así como para la telemetría embarcada (tiempos por vuelta, más de 100 circuitos disponibles, análisis de temperaturas y tiempos...). Hay, además,
una tercera pantalla informativa (no de entretenimiento) delante del acompañante y el espacio es mayor que en el Gallardo, no solo para acomodar a personas más altas (4,5 cm en espacio para piernas y 3,4 extra para la cabeza), sino
para conducir con casco sin golpear el techo.
Por cierto,
Temerario es el nombre de un toro de 526 kg que fue indultado por el torero Arturo Saldívar durante la octava corrida de la Feria de San Marcos en la Plaza de Toros Monumental de Aguascalientes, en México, el 28 de abril de 2023. Temerario era uno de los siete toros de Begoña que se lidiaron en la corrida y fue el único que se indultó. Hoy, en Estoril, él ha sido el jefe.
Él nos ha indultado a nosotros.