mfabreg3
Forista Legendario
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Será por eso que tengo la espalda medio rota...
Pues eso, que cuando ya estaba contando los días que me faltaban para las vacaciones de navidad y precisaba los días que dedicaría a los trabajos, me llamaron de la empresa donde estuve en verano para ir a repartir gases industriales con el Cabstar estos días. Como uno parece que no sabe vivir sin estrés, dije que sí.
El otro día, cuando ya había hecho todos los repartos y aún era temprano, me mostraron medio patio, la carretilla, y unos cuantos montones de grava a esparcir y compactar. Ya con músculos que no sabía que existían quejándose y con la grava esparcida era hora de compactarla, así que llegó el turno del vehículo. Al ser de color amarillo primero pensé que se trataba de un Ibiza FR, pero al encenderlo vi que en realidad era la variante tricilíndrica diésel del Ibiza. Aún me tiemblan las ideas, vibra casi tanto como un TDI petrocladero de tres cilindros. Ahí tenéis una foto del aparato sacado del Google, un Case Vibromax FR Edition Sport 102 TDI:
Para quien no sepa cómo funciona el aparato, cuando le das a un botón se pone a dar saltos la máquina entera para compactar el suelo. La que usé digamos que tuvo días mejores, pues la palanca de ir hacia adelante originalmente tenía un muelle de modo que al soltar la palanca iba a punto muerto y el aparato paraba. Ahora funciona a golpecitos: no se mueve, no se mueve, no se mueve, hostia que salgo despedido. En una de estas casi me cargo el Patrol que tiene el jefe para piezas. Tiré de la palanca hacia atrás, salió despedida de una forma tan bestia que de la inercia moví la palanca hacia adelante, el trasto cambió de sentido y salió despedido hacia el Patrol del jefe. Del bote, al agarrarme al mango del volante, éste se rompió y me quedé sin dirección con el trasto yendo a toda leche contra el Patrol. Aún no sé cómo no le di.
La que estuve usando, a diferencia de la de la foto, tenía un arco antivuelco con una luz rotativa encima. Bien, pues a la que probé la vibración, tras dar un par de pasadas se me cayó la luz por la cabeza, imaginaos el susto.
Y nada, me quedo con los motores de gasolina.
Pues eso, que cuando ya estaba contando los días que me faltaban para las vacaciones de navidad y precisaba los días que dedicaría a los trabajos, me llamaron de la empresa donde estuve en verano para ir a repartir gases industriales con el Cabstar estos días. Como uno parece que no sabe vivir sin estrés, dije que sí.
El otro día, cuando ya había hecho todos los repartos y aún era temprano, me mostraron medio patio, la carretilla, y unos cuantos montones de grava a esparcir y compactar. Ya con músculos que no sabía que existían quejándose y con la grava esparcida era hora de compactarla, así que llegó el turno del vehículo. Al ser de color amarillo primero pensé que se trataba de un Ibiza FR, pero al encenderlo vi que en realidad era la variante tricilíndrica diésel del Ibiza. Aún me tiemblan las ideas, vibra casi tanto como un TDI petrocladero de tres cilindros. Ahí tenéis una foto del aparato sacado del Google, un Case Vibromax FR Edition Sport 102 TDI:
Para quien no sepa cómo funciona el aparato, cuando le das a un botón se pone a dar saltos la máquina entera para compactar el suelo. La que usé digamos que tuvo días mejores, pues la palanca de ir hacia adelante originalmente tenía un muelle de modo que al soltar la palanca iba a punto muerto y el aparato paraba. Ahora funciona a golpecitos: no se mueve, no se mueve, no se mueve, hostia que salgo despedido. En una de estas casi me cargo el Patrol que tiene el jefe para piezas. Tiré de la palanca hacia atrás, salió despedida de una forma tan bestia que de la inercia moví la palanca hacia adelante, el trasto cambió de sentido y salió despedido hacia el Patrol del jefe. Del bote, al agarrarme al mango del volante, éste se rompió y me quedé sin dirección con el trasto yendo a toda leche contra el Patrol. Aún no sé cómo no le di.
La que estuve usando, a diferencia de la de la foto, tenía un arco antivuelco con una luz rotativa encima. Bien, pues a la que probé la vibración, tras dar un par de pasadas se me cayó la luz por la cabeza, imaginaos el susto.
Y nada, me quedo con los motores de gasolina.
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