Vuelven las maniobras rusas: el escaparate bélico de Putin pone en guardia a sus vecinos
Rusia comienza sus ejercicios junto a Bielorrusia en un área de alto tensión
	
	
	
		
		
		
		
	
	
Uno de los buques rusos que participa hoy en las maniobras Zapad.Efe
Xavier ColásEnviado especial Lublin (Polonia)
Enviado especialLublin (Polonia)
Rusia y Bielorrusia comenzaron este viernes un importante ejercicio militar conjunto a las puertas de la OTAN, en un momento de creciente tensión con la alianza occidental, apenas dos días después de que 
Polonia derribara drones rusos que cruzaron su espacio aéreo. Para los países limítrofes con Rusia y Bielorrusia, estas maniobras traen malos recuerdos: en 2021, las maniobras Zapad simularon operaciones ofensivas y sirvieron de cobertura a los preparativos rusos de la invasión a gran escala de Ucrania en febrero de 2022. Aunque Moscú insista estos días en que se trata sólo de maniobras, está repitiendo el mismo mensaje que mantuvo hasta casi la noche antes de atacar 
Ucrania por múltiples flancos.
Desde Polonia y los bálticos es más difícil relativizar cada exhibición de músculo militar. Como dijo una vez Jim Townsend, ex subsecretario adjunto de Defensa de Estados Unidos para política europea y de la OTAN: "Rusia no es la Unión Soviética, pero 
en la región nórdica y báltica sigue siendo una superpotencia y cuando Moscú se aclare la garganta, la región lo oirá". El primer ministro 
Donald Tusk estima que los ejercicios serán "muy agresivos desde el punto de vista de la doctrina militar".
Los ejercicios durarán hasta el 16 de septiembre e incluirán prácticas de planificación del 
uso de armas nucleares e involucrarán entre 
7.000 y 8.000 soldados, una cifra significativamente menor que las ocasiones anteriores. "Pero los ejercicios de utilización de armas nucleares podrán consistir únicamente en pruebas de conocimientos sobre los procedimientos, o posiblemente en el uso de vehículos de lanzamiento: la aviación táctica bielorrusa y los lanzadores de misiles Iskander", explica el analista 
Jakub Chrust.
Bielorrusia limita al oeste con tres miembros de la OTAN: Polonia, Lituania y Letonia, y al sur con Ucrania. Incluso antes del incidente, el primer ministro polaco, Donald Tusk, había calificado las próximas maniobras Zapad de 
"muy agresivas" y anunció que Polonia cerraba su frontera con Bielorrusia a medianoche del jueves.
El régimen bielorruso es una preocupación de primer orden para sus vecinos. Ha permitido a Rusia instalar misiles nucleares tácticos en su territorio y se prepara para albergar el nuevo misil hipersónico Oreshnik de Moscú. Rusia no ha revelado cuántas armas nucleares tácticas ha desplegado en Bielorrusia, pero Lukashenko afirmó en diciembre que su país contaba con varias decenas. 
Alexander Lukashenko, es un aliado cercano del presidente ruso, y lo ha respaldado durante toda la guerra, aunque sin comprometer sus propias tropas en el combate por miedo a una nueva oleada de protestas.
El viceministro de Defensa polaco, 
Cezary Tomczyk, dijo que Polonia se había estado preparando durante muchos meses y estaba realizando sus propios ejercicios, cuyo nombre en código son 
Iron Defender. "Hay alrededor de 30.000 soldados en el ejercicio 'Iron Defender' y unos 5.000 en la frontera" con Bielorrusia, dijo Tomczyk en respuesta a las preguntas de Reuters. Lituania también ha dicho que está protegiendo su frontera debido al ejercicio militar.
El mnisterio de Defensa de Rusia reveló que en la primera fase del ejercicio, las tropas simularían repeler un ataque contra Rusia y Bielorrusia, cuya alianza se conoce como el Estado de la Unión. La segunda etapa se centrará en "
restaurar la integridad territorial del Estado de la Unión y aplastar al enemigo, incluso con la participación de un grupo de fuerzas de coalición de estados amigos", dijo el ministerio. Las maniobras incluirían drones, guerra electrónica y el uso de inteligencia artificial para apoyar la toma de decisiones. El mayor general 
Pavel Muraveiko, jefe del Estado Mayor bielorruso, dijo que todos los ejercicios se realizarán a una 
"distancia significativa" de las fronteras con los miembros de la OTAN y Ucrania. La mayor parte del ejercicio se llevará a cabo alrededor de la ciudad de Barysau, a unos 74 kilómetros al noreste de Minsk, aunque algunas "pequeñas unidades realizarán tareas prácticas para repeler a un enemigo hipotético" en áreas cercanas a la frontera con Polonia y Lituania.
Ha habido mucha controversia con las cifras de soldados que toman parte. La inteligencia lituana aseguró que estarían en Zapad hasta 
30.000 soldados, de los cuales solo 8.000 llegarían en territorio bielorruso. Con sus fuerzas muy comprometidas en la 
guerra de Ucrania, está previsto que Moscú sólo mantenga desplegados unos 2.000 soldados en Bielorrusia, aunque que el ejercicio total también cubrirá los distritos militares rusos de Moscú y Leningrado, el enclave de Kaliningrado y los mares Báltico y de Barents. Esto involucrará a las Flotas del Báltico y del Norte y ampliará el alcance geográfico del ejercicio, desde Bielorrusia hasta la frontera marítima de Noruega en el Ártico.
Un informe del Consejo Alemán de Relaciones Exteriores apuntó que: 
"El ejercicio brindará a la OTAN lecciones importantes sobre la concepción rusa de una guerra futura". Como medida de precaución, se están realizando ejercicios paralelos de la OTAN en Polonia, Estonia, Lituania y Letonia, con la participación de al menos 50.000 tropas aliadas.
El Kremlin declaró el viernes que la preocupación europea por los ejercicios era una respuesta emocional basada en la hostilidad hacia Rusia. Se ha negado a dar más explicaciones sobre el incidente con los drones de esta semana, que en Polonia es vista como una 
llamada de atención para la OTAN y una prueba de sus respuestas. Bielorrusia y Rusia son países que producen e incorporan sus propios drones a sus fuerzas armadas. El uso de aparatos no tripulados son el nuevo quebradero de cabeza de los vecinos de Rusia.
"Los gobiernos europeos deberían tratar Zapad 2025 principalmente como un teatro político para los líderes Alexander Lukashenko y Vladimir Putin", explican 
Vasil Navumau y 
Kirill Shamiev en su informe para ECFR Zapad contra Occidente. Se trata de una forma de "diplomacia férrea", una "escalada para intensificar el clima de seguridad en Europa del Este e 
influir en las conversaciones entre Moscú, Minsk y Washington, sobre todo mientras Lukashenko presiona para obtener el reconocimiento de Estados Unidos".
	
	
		
			
				
			
			
				
				Rusia y Bielorrusia comenzaron este viernes un importante ejercicio militar conjunto a las puertas de la OTAN, en un momento de creciente tensión con la alianza occidental, apenas...
				
					
						
							 
						
					
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