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La mía igual, pero yo creo que lo hace para ver si mi "radar" sigue funcionando.Joer, a mí me avisa mi mujer, "mira esa". Ni pendiente voy yo



La mía igual, pero yo creo que lo hace para ver si mi "radar" sigue funcionando.Joer, a mí me avisa mi mujer, "mira esa". Ni pendiente voy yo
La mía igual, pero yo creo que lo hace para ver si mi "radar" sigue funcionando.![]()
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Joer, a mí me avisa mi mujer, "mira esa". Ni pendiente voy yo
Tú mujer es una santa y sabe que tú eres de fiar.
Y tías? Has visto? Porque a mí me ehcuessen losoho.
Del 10 al 80% en 15 minutos con una batería de 94kW útiles... Brabus
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Ver el archivos adjunto 183349
Se puede reír por muchas razones:
- sabe que la pregunta tiene trampa porque divide el sector, e incluso a la sociedad, porque han hecho de esto algo de ideología política y social y, diga lo que diga, habrá un sector que no comulgará con él. Seguramente tiene una opinión fundada y no quiere decirla, por lo que tira de risas y ahí queda la cosa,
- no se ha tomado la pastilla y la esquizofrenia ya lo va "poseyendo",
- le importa una leche la pregunta porque él lo que hace es convertir los coches, haciendo que el diseño se asemeje a lo que él considera que es arte a cuatro ruedas, independientemente de lo que mueva el coche,
- le apasionan los V12 y si te presentas con algo por debajo de eso, se ríe de ti tal y como aparece en el vídeo y te pone cara de asco,
- etc.,
¿Cómo van esos chispazos?
Esta mañana estuve viendo los Red Bull de F1 en Estoril. Ya he llegado a Sevilla. Depósito lleno para mañana y otro paseo.
Antonio, c**o, te has comprado un coche eléctrico, po fale, a disfrutarlo con salud. A mí ayer me tocó un taxi eléctrico. A mí me llevò y el taxista contento. Poyahtà.
Por cierto, fui al casino a dar un voltio por curiosidad. Uno de los sitios donde más miseria humana he visto. Vaya semblantes.
Ein?Espero que no hayas perdido lo de la entrada del Tesla.
Jajajaj, no lo había pensando. De todas formas me alegro de que te pase lo mismo, por diversos motivos
Igualmente.
Sigue habiendo la misma complicidad que cuando empezamos hace ya casi 26 años.![]()
No jugué un solo Euro.Que espero que no hayas perdido en el casino lo que habías ahorrado para dar la entrada del Tesla![]()
Misma frase que me decían los electrofans hace 3 años cuando ya llevaban 2 años o más con el coche: "ahora sí que ya no hay excusa".De hace 3 años a esta parte esto ha evolucionado muchísimo, puntos de carga, velocidad para cargar, autonomía de los vehículos, nada que ver.
Tú antes molabasSólo entro por tocar los webos...llenar depósito de 54 litros diésel y después de llevar 250 kms, seguir teniendo está autonomía ??
Para los que no tenemos disponibilidad de "carga gratuita" hay más opciones
P.D. consumo a velocidades entre 125-135
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Más o menos que si le preguntas a un abuelo de 99 años que viajaba en burro con 1 año, y no creo que sea ninguna mentira, el mundo va evolucionando y si esto sigue a este ritmo, dentro de 3 años diremos lo mismo, no veo el problema.Misma frase que me decían los electrofans hace 3 años cuando ya llevaban 2 años o más con el coche: "ahora sí que ya no hay excusa".
Que cosas, eh?
Supongo que cuando mejore la cosa se repetirá la misma frase, y así seguirá una y otra vez.
Cada uno tiene su punto de inflexión. El mío aún no ha llegado.
¿Cómo van esos chispazos?
Esta mañana estuve viendo los Red Bull de F1 en Estoril. Ya he llegado a Sevilla. Depósito lleno para mañana y otro paseo.
Antonio, c**o, te has comprado un coche eléctrico, po fale, a disfrutarlo con salud. A mí ayer me tocó un taxi eléctrico. A mí me llevò y el taxista contento. Poyahtà.
Por cierto, fui al casino a dar un voltio por curiosidad. Uno de los sitios donde más miseria humana he visto. Vaya semblantes.
La auténtica salud. Y a 1,20-1,30 verdad? Deseando llegar esta tarde al pueblo que hay feria, ya tienen los cajones de cerveza en las cámaras que la gente directamente pide cajonesYo no tengo planes tan guapos pero en el pueblo se está como dioxx
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No pido más.
Botijos fríos y vermús largos![]()
Ni falta que te hace. La guapura de los planes es siempre relativa.Yo no tengo planes tan guapos pero en el pueblo se está como dioxx
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No pido más.
Botijos fríos y vermús largos![]()
A mí me importa un carajo lo que se compre cada uno. Eso sí, el coche eléctrico NO es una evolución de nada. Ya lo he explicado mil veces. Es un viejo concepto del que se ha tirado últimamente por determinado tipo de intereses y se está tratando de imponer desde las administraciones con diferentes tipos de maniobras y estrategias. Luego ya están apreciaciones y adaptaciones personales que a mí ni me va ni me vienen, ni juzgo.Más o menos que si le preguntas a un abuelo de 99 años que viajaba en burro con 1 año, y no creo que sea ninguna mentira, el mundo va evolucionando y si esto sigue a este ritmo, dentro de 3 años diremos lo mismo, no veo el problema.
Hasta que salga el Tesla Roadster ..Más o menos que si le preguntas a un abuelo de 99 años que viajaba en burro con 1 año, y no creo que sea ninguna mentira, el mundo va evolucionando y si esto sigue a este ritmo, dentro de 3 años diremos lo mismo, no veo el problema.
No se si el problema es el coche (x cargas al mes) o el conector, se supone que varios usos diarios, me decanto por el conector.
El relato queda precioso, obviamente un buen coche de combustion y mas si yas es de epocas pasadas transmite muchas sensaciones que nunca te dara un electrico.—Enciende las luces largas —dijo Koester.
El asfalto brilló con tonos grises y desvaídos ante nosotros. Aún llovía un poco; las pequeñas gotas me azotaron el rostro como una violenta granizada.
El viento sopló en fuertes rachas, las nubes flotaron a baja altura, se desgarraron sobre el bosque y, entre ellas, filtróse la plata. La niebla acumulada detrás de mis ojos se disipó. El trepidar del motor se comunicó a mi cuerpo por conducto de los brazos. Percibí claramente el enorme poder de la máquina. Las explosiones de los cilindros quebrantaron el rígido entumecimiento de mi cerebro. Los pistones martillaron como bombas neumáticas en mi sangre. Cobré aplomo. El coche se disparó por la ancha carretera.
—Más aprisa —dijo Koester.
Los neumáticos empezaron a silbar. Árboles y postes telegráficos pasaron aullando por nuestro lado. Una aldea desfiló con estrépito. Mi mente se despejó por completo.
—Más gas —dijo Koester.
—Pero ¿podré dominarlo todavía? El pavimento está húmedo.
—Tú mismo lo notarás. Cambia a tercera antes de llegar a las curvas y tómalas con gas.
El motor bramó. El viento chocó como un cuerpo sólido contra mi cara.
Me resguardé tras el parabrisas. Súbitamente, me fundí con el tronar de la máquina, vehículo y cuerpo humano fueron uno solo, una sola tensión, una vibración homogénea muy alta, sentí las ruedas bajo los pies, sentí el suelo, la carretera, la velocidad… Algo enderezó todo de golpe, la noche aulló y silbó expulsando todos los residuos de mi interior, los labios se apretaron, las manos se tornaron garfios; por último, sólo fui celeridad y furia, un ser insensible y, al propio tiempo, excepcionalmente alerta.
En una curva coleó el coche. Di un golpe, dos golpes de volante en dirección contraria y aceleré. Por un instante, todo pareció desinflarse como un globo, pero «Carlos» se enderezó en seguida.
—Bien hecho —dijo Koester.
—Eran hojas muertas mojadas —observé sintiendo el calor y el relajamiento que fluyen por la piel cuando ya ha pasado el peligro.
Koestler asintió.
—En otoño, ésa es la maldita fatalidad de las curvas entre bosques.
¿Quieres un cigarrillo?
—Sí —dije.
Nos detuvimos y fumamos.
—Ahora ya podemos regresar —dijo Koester cuando terminamos.
Conduje de vuelta a la ciudad y, una vez allí, descendí.
—Fue una buena idea el salir a dar un paseo, Otto. Ahora ya me encuentro despejado.
—La próxima vez te enseñaré otro sistema para tomar las curvas —dijo—. Hacer girar el coche con los frenos. Pero sólo puede hacerse sobre una carretera seca.
—Estupendo, Otto. Que duermas bien.
—Que duermas bien, Robby.
«Carlos» se alejó echando chispas. Entré en la casa. Me encontraba muy cansado, pero completamente tranquilo. La tristeza había desaparecido.
Ha faltado—Enciende las luces largas —dijo Koester.
El asfalto brilló con tonos grises y desvaídos ante nosotros. Aún llovía un poco; las pequeñas gotas me azotaron el rostro como una violenta granizada.
El viento sopló en fuertes rachas, las nubes flotaron a baja altura, se desgarraron sobre el bosque y, entre ellas, filtróse la plata. La niebla acumulada detrás de mis ojos se disipó. El trepidar del motor se comunicó a mi cuerpo por conducto de los brazos. Percibí claramente el enorme poder de la máquina. Las explosiones de los cilindros quebrantaron el rígido entumecimiento de mi cerebro. Los pistones martillaron como bombas neumáticas en mi sangre. Cobré aplomo. El coche se disparó por la ancha carretera.
—Más aprisa —dijo Koester.
Los neumáticos empezaron a silbar. Árboles y postes telegráficos pasaron aullando por nuestro lado. Una aldea desfiló con estrépito. Mi mente se despejó por completo.
—Más gas —dijo Koester.
—Pero ¿podré dominarlo todavía? El pavimento está húmedo.
—Tú mismo lo notarás. Cambia a tercera antes de llegar a las curvas y tómalas con gas.
El motor bramó. El viento chocó como un cuerpo sólido contra mi cara.
Me resguardé tras el parabrisas. Súbitamente, me fundí con el tronar de la máquina, vehículo y cuerpo humano fueron uno solo, una sola tensión, una vibración homogénea muy alta, sentí las ruedas bajo los pies, sentí el suelo, la carretera, la velocidad… Algo enderezó todo de golpe, la noche aulló y silbó expulsando todos los residuos de mi interior, los labios se apretaron, las manos se tornaron garfios; por último, sólo fui celeridad y furia, un ser insensible y, al propio tiempo, excepcionalmente alerta.
En una curva coleó el coche. Di un golpe, dos golpes de volante en dirección contraria y aceleré. Por un instante, todo pareció desinflarse como un globo, pero «Carlos» se enderezó en seguida.
—Bien hecho —dijo Koester.
—Eran hojas muertas mojadas —observé sintiendo el calor y el relajamiento que fluyen por la piel cuando ya ha pasado el peligro.
Koestler asintió.
—En otoño, ésa es la maldita fatalidad de las curvas entre bosques.
¿Quieres un cigarrillo?
—Sí —dije.
Nos detuvimos y fumamos.
—Ahora ya podemos regresar —dijo Koester cuando terminamos.
Conduje de vuelta a la ciudad y, una vez allí, descendí.
—Fue una buena idea el salir a dar un paseo, Otto. Ahora ya me encuentro despejado.
—La próxima vez te enseñaré otro sistema para tomar las curvas —dijo—. Hacer girar el coche con los frenos. Pero sólo puede hacerse sobre una carretera seca.
—Estupendo, Otto. Que duermas bien.
—Que duermas bien, Robby.
«Carlos» se alejó echando chispas. Entré en la casa. Me encontraba muy cansado, pero completamente tranquilo. La tristeza había desaparecido.
Y parar en cà las lumis.Ha faltado
Nos hacemos unas pajillas ? .. sin mariconadas eh ..
Muchas veces unos botellines bien fríos con unas tapas de papada ibérica o de bacalao desalado y un paquete de Winston, en compañía de un par de buenos amigos es mejor plan que cualquier otro. Sea el que sea.Yo no tengo planes tan guapos pero en el pueblo se está como dioxx
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No pido más.
Botijos fríos y vermús largos![]()