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Interceptor
Buscamos respuesta a "qué es un auténtico Alfa Romeo"
Cuando lo has ganado todo, cuando lo has sido todo en la industria del automóvil, reinventarse y continuar hacia adelante es siempre un gran desafío representado por la necesidad de resistirse a tumbarse constantemente en el pasado y recrearse en viejas glorias.
La historia de Alfa Romeo la componen una serie de destellos y de brillos que arrancan en la primera década del siglo XX y se prolongan hasta las victorias del 155 en el DTM y el ITCC a finales de los noventa. Entre medias, miles de victorias en todo tipo de campeonatos, desde carreras de resistencia a turismos, pasando por Fórmula 1 y cualquier disciplina que se te pueda ocurrir.
Y por cada coche de carreras exitoso, Alfa tuvo un equivalente igual de brillante para la carretera, dispuesto a ser matriculado y obsequiar a su propietario con una conducción a un nivel único. Basta echar la vista a los años setenta para ver una Alfa Romeo que igualaba y desafiaba a BMW, en los circuitos y en los concesionarios.
El problema es que de aquella Alfa Romeo a la que Fiat intentó prolongar tras quedarse con la compañía, las cosas cambiaron mucho. Demasiado. Y de eso nos acordamos especialmente cuando a principios de esta semana, con motivo de la presentación de la nueva gama Quadrifoglio Verde, la marca nos mostró en Balocco algunas de sus piezas históricas más preciadas.
Con el plan de producto ya anunciado, es complicado buscar trazas de ADN Alfa en los productos actuales
Marchionne anunció un plan de renovación para Alfa Romeo. Un plan que prometía "recuperar el ADN auténtico de Alfa Romeo". Y algunas personas se preguntaron "qué es un auténtico Alfa Romeo". Y es que hay muchos alfistas actuales que disfrutan de vehículos, si no actuales, sí de las últimas generaciones, y se cansan de escuchar una y otra vez esa frase de que estos coches "no son auténticos Alfa".
El problema de Alfa Romeo viene de lejos. Cuando hacía los coches que gustaban a todo el mundo, no lograba ser rentable. Cuando amplió su gama para incluir coches de segmento C y sacar más rendimiento económico en un segmento más pequeño, se dio de bruces con el desastre del Alfasud en cuanto a calidad de producto, y dilapidó la imagen de marca mientras hacía más aguas en lo económico.
Y en esas estaba cuando aterrizó en manos de Fiat. Los italianos instauraron un sistema económico para hacer a Alfa rentable. Un sistema que ahora todos damos por hecho, pero que por entonces no era tan común: El empleo de plataformas y el escalado de costes a gran volumen.
Así comenzaron a nacer Alfas sobre plataformas Fiat. Coches como el Fiat Tipo derivaron en el Alfa 155. El Croma se emparentó con el 164, y el 33 surgió de la base del Alfasud hasta que el 145 se cambió a plataforma Fiat también.
El problema es que Fiat creyó que estaba en condiciones de vender "sólo imagen de marca", obviando que la base técnica era 100% Fiat. Y si bien, hoy por hoy, a Audi eso le funciona en ciertos segmentos, montando coches de base común con Volkswagen, a Alfa Romeo no le salió bien la jugada. Esto no quita momentos de brillo con productos como los 147 GTA (o el 147 en general) pero jalonados por una falta de inversión en imagen de marca y recursos propios.
El problema estaba en la exigencia del conductor, en la exigencia del alfista. Aquellos que habían conducido coches como los Giulia, los Alfetta y los 75, por citar tres ejemplos, se encontraban con coches que, a nivel dinámico y tecnológico no resultaban tan diferentes a la competencia como los "auténticos Alfa Romeo".
Y tal vez esto nos lleve a dar respuesta a la pregunta de "¿qué es un auténtico Alfa?". Creo que la mayor parte de los alfistas que han tenido oportunidad (hemos tenido oportunidad) de conducir en alguna ocasión un Giulia Sprint GTA o algún derivado de los cupés de las series 105 y 115, coincidiremos en señalar a esta generación de coches diseñados por Bertone como "el Alfa Romeo por antonomasia".
Sí, no es tan lujoso y deportivo como los Alfa de pre-guerra, pero los Giulia GTA y sus parientes son coches que lo tienen todo: Una estética diferencial y preciosa, una puesta a punto dinámica y deportiva, un motor cuatro cilindros en aluminio que suena a gloria y empuja con ganas... Y sobre todo, ese "no sé qué" que te transmite el coche a través de sus mandos y maneras, que habla contigo y que te enamora.
Porque no siempre uno se enamora de la chica más guapa del baile, sino de la que más "feeling" le da, y ese es el caso del Giulia GTA.
Pero de aceptar ese coche como el estándar de "lo que debe ser un Alfa Romeo", surgen el resto de problemas. Durante la presentación de los nuevos Giulietta QV y MiTo QV, la gente de Alfa Romeo tenía una patata caliente entre manos. Nos estaban hablando de dos productos con plataforma Fiat, con muchos elementos Fiat. Dos productos de los que el propio Marchionne ha renegado en cierto modo, queriendo presentar un plan de "borrón y cuenta nueva". Y al mismo tiempo, la gente de la marca tiene que venderlos y defenderlos, al menos dos años más, a la espera de "la nueva era".
Es complicado. Y los responsables de la macar, con la mejor de las intenciones, buscaban ese hilo conductor, esa conexión pasado-presente para esos dos productos, que enlazaran al Giulietta QV actual con sus ancestros, y especialmente con el Giulia GTA. Pero esa conexión no existe.
No existe porque donde el Giulia GTA te transmitía sensaciones, te hablaba a través de sus mandos, y contaba con una técnica y una estética propias, el Giulietta QV es un coche mucho más genérico. No, no es malo. Ya os lo conté en la prueba: Es un coche adecuado. Pero no destaca, no emociona, no apasiona en sus maneras, en su forma de moverse, en cómo te comunica el estado del asfalto (o directamente, cómo no te lo comunica).
Curiosamente, por coincidencias del destino, a la presentación del Giulietta Quadrifoglio Verde me tocó acudir justo tras devolver el M235i de BMW. Y lo único que podía pensar mientras "afotaba" los viejos mitos de Alfa Romeo, mientras babeaba los cupés de la serie 105 y 115, era que el M235i tenía mucho más que ver con estos coches de lo que se emparentaban con el Giulietta QV.
Así llegué al convencimiento de cómo Alfa debería respetar su pasado. Su ADN, y construir su futuro. Mientras Alfa vendía sus Giulia GTA y triunfaba con ellos, BMW tenía sus 2002 tii. Aquellos dos coches eran equivalentes en muchas cosas y distintos también en muchas otras cosas. Ambos tenían una enorme influencia de Giorgio Giugiaro (de eso hablaremos otro día), ambos eran cupés deportivos relativamente económicos, ligeros, y muy pasionales de conducir.
Ahora, "chopotocientos años" después, en 2014, BMW tiene su Serie 2, que es una oda a todo lo que hizo grande a aquellos BMW de la serie "02". Y Alfa Romeo tiene, por el momento, a su Giulietta. Lo mires por donde lo mires, BMW hace una fiel reinterpretación en clave moderna de su viejo pasado, mientras Alfa Romeo se ha ido a otro sitio del mercado, con un producto "más Golf", más genérico que otra cosa.
Alfa necesita recuperar el espíritu de aquellos épicos Giulia Sprint GTA, y transformarlo en un rival de productos como el M235i
Y claro, no puedes intentar vencer a los alemanes copiando a los alemanes (en eso de hacer un coche bueno en todo, especial en nada, como es el Golf).
¿A qué nos lleva todo esto? Pues a volver a la "eterna promesa" de Marchionne. Una promesa que nos dice que la nueva plataforma de tracción trasera será la encargada de acoger al nuevo modelo de segmento C de la firma. El sucesor del Giulietta actual, que tomará la forma de un sedán deportivo de cuatro puertas, y también tendrá "otro derivado con otra carrocería sin confirmar".
Y es que si Alfa quiere triunfar recuperando ese sabor a "auténtico" Alfa Romeo, lo tiene fácil y a la vez muy difícil. Lo tiene fácil en tanto en cuanto tiene un perfecto antecesor en casa para "copiar" el espíritu, en el Giulia GTA. Y lo tiene complicado porque tiene que romper con todo lo visto hasta ahora, para crear un rival creíble de la Serie 1 y Serie 2, y poder pedir el mismo dinero que BMW por sus coches.
¿Lo conseguirán? El tiempo lo dirá. Pero entre tanto, disfruta con la galería de viejas glorias Alfa que he retratado para ti.
Fuente: http://es.autoblog.com/2014/06/13/el-peso-de-la-leyenda-y-del-pasado/
Galería: http://es.autoblog.com/photos/alfas-romeos-cl-sicos-en-balocco/2704378/
