*NANO*
Clan Leader
- Modelo
- LFA,MC12,F1
- Registrado
- 27 Ene 2007
- Mensajes
- 144.473
- Reacciones
- 344.291
El CEO de Bentley, Frank-Steffen Walliser, lo tiene claro: "Llevar el Continental GT al extremo"
Para el máximo responsable de Bentley, los lujos y el elevado peso del Continental GT no deberían impedirle cumplir en circuito, y quiere demostrarlo con una variante radical que estaría en estudio.
Bentley es una marca a la que no le gustan los encasillamientos. Su prioridad es el transporte de máximo lujo, por supuesto, y en los últimos años los avances en propulsión eléctrica también han sido una batalla importante para ellos. Pero ahora, su recién nombrado CEO Frank-Steffen Walliser asegura que el elitista fabricante británico también tiene ganas de más prestaciones.
"El Continental GT tiene mucho margen para explorar esa posibilidad", relató Walliser en una reciente entrevista a la revista Evo. "Podemos llevar el GT más cerca de sus verdaderos límites, en ambos extremos, el del lujo y el del rendimiento, pero sobre todo en este último. En eso podemos ofrecer mucho más. Tampoco hablo de alcanzar los niveles de, digamos, un [Porsche] 911, pero desde luego sí ofrecer una mayor variedad en ese sentido que atraiga a más clientes, en lugar de que vayan cambiando entre modelos".

Teniendo en cuenta que Walliser atesora varias décadas de experiencia previa en Porsche, no es de extrañar que vea margen para una mayor deportividad en el GT estrella de su actual compañía. Este ejecutivo de origen alemán apoyó el lanzamiento del hipercoche 918 Spyder y renovó por completo los 911 y 718 en 2019, por lo que su bagaje profesional está estrechamente relacionado con la deportividad. Y la propia Bentley, por su parte, también experimentó en el pasado con variantes más prestacionales del Continental GT, como por ejemplo el Continental Supersports de su primera generación o el Continental GT3-R de la segunda.
En la entrevista, Walliser también aprovechó para valorar un hipotético regreso de Bentley a las competiciones del motor. Y es que, a pesar de poseer un palmarés histórico más que envidiable, los de Crewe dejaron de aparecer por las parrillas cuando terminó su último programa de GT3 en 2020, y no parece que esa ausencia vaya a terminarse pronto. En opinión de Walliser, de cumplirse ese regreso, únicamente sería en el caso de que Bentley lo proyectara como "un compromiso a largo plazo" y dentro de un modelo de negocio "que aporte a lo que la marca hace hoy y quiere hacer mañana".
Así lo ejemplifica con su experiencia pasada en la entrevista a Evo: "En Porsche, la competición estaba ligada a todo lo que hacíamos, especialmente el 911, pero debes ser cuidadoso con ello porque estás sujeto a muchos factores que escapan a tu control, y puedes acarrear más daños que beneficios para tu negocio".

Por supuesto, todo este enfoque en las prestaciones no significa que el nuevo CEO de Bentley vaya a descuidar esa exclusividad que ansían sus clientes. Según Walliser, seguir lanzando modelos de producción limitada como el Batur o el Bacalar forma parte de su plan para unificar el lujo y la velocidad. Como explica este ejecutivo en la entrevista, si los clientes son capaces de pagar 2,6 millones de euros por un Bentley no hay ninguna presión para crear un hipercoche emblemático, a lo que añade su impresión personal sobre el reducido volumen real de clientes que buscan hoy un superdeportivo tope de gama con motor central.

Con el revivido Flying Spur recién salido al mercado, el éxito del Continental GT y un nuevo modelo eléctrico en camino, Walliser asegura que las finanzas de Bentley están superando sus expectativas. La compañía sigue siendo pequeña (en cuanto a plantilla y unidades producidas) dentro del Grupo Volkswagen, pero su CEO afirma que ejemplifica el equilibrio entre escala y rentabilidad que puede alcanzar una marca de ultra lujo: "Es una compañía británica mucho más fuerte de lo que parece desde fuera. Lo de mostrar confianza no es algo muy británico, pero Bentley es fuerte y tiene confianza".