Se despacha agusto.
Cuando alguien que prueba coches de la talla del F-40, Lancia 037 Grupo B, 458, EB110, etc, expresa el disfrute de la conducción de un simple Fiat Tipo 16V y cuando tiene entre las manos un mito como éste lo critica de esta manera, se podrá estar de acuerdo o no, pero motivos para calificarlo de esa manera debe de tener de sobra. Aunque estuviera equivocado.
Seguramente su punto más débil, paradójicamente, sea su radical estética.
Si a nivel de marketing/producto lo hubieran orientado de otra manera, quizás no hubiera generado algunas decepciones