D
Desenfoque
Invitado
Antes de nada debo dejar claro que ni quiero promover ningún tipo de conducta antireglamentaria ni mucho menos conducción temeraria -casi suicida en este caso-. Se trata simplemente de aportar un dato que seguro que muchos desconoceréis o que tan sólo conocíais de oídas como leyenda urbana.
En contra de lo que desearía el señor Navarro y los ingenieros que diseñan los radares vulgaris de nuestras carreteras, estos tienen una serie de límites en su funcionamiento. Uno de ellos, tal y como veremos en el vídeo a continuación, es que a partir de los 300 km/h no son capaces de registrar la velocidad del vehículo.
Me da que no ha habido muchas ocasiones de librarse de un radar por este método, tanto por las exigencias del vehículo como por la descabellada maniobra, pero ahí queda el dato. No obstante es evidente que esto puede afectar a una serie de modelos, los usados comunmente por las autoridades quizás, porque no hay más que ver cualquier competición o prueba de velocidad específica para ver como los radares son capaces de atestiguar cifras altísimas de velocidades punta.
Bajo estas líneas os dejo con el reportaje que una televisión austríaca realizó tomando como cobayas a un Audi A5 a unos 250 km/h, un Chrysler 300C SRT8 a 265 km/h, un Porsche 911 Carrera S Cabrio a casi 280 km/h, y finalmente a un Lamborghini Gallardo Spyder a más de 300 km/h.
YouTube - Speed Test 300 km/h
En contra de lo que desearía el señor Navarro y los ingenieros que diseñan los radares vulgaris de nuestras carreteras, estos tienen una serie de límites en su funcionamiento. Uno de ellos, tal y como veremos en el vídeo a continuación, es que a partir de los 300 km/h no son capaces de registrar la velocidad del vehículo.
Me da que no ha habido muchas ocasiones de librarse de un radar por este método, tanto por las exigencias del vehículo como por la descabellada maniobra, pero ahí queda el dato. No obstante es evidente que esto puede afectar a una serie de modelos, los usados comunmente por las autoridades quizás, porque no hay más que ver cualquier competición o prueba de velocidad específica para ver como los radares son capaces de atestiguar cifras altísimas de velocidades punta.
Bajo estas líneas os dejo con el reportaje que una televisión austríaca realizó tomando como cobayas a un Audi A5 a unos 250 km/h, un Chrysler 300C SRT8 a 265 km/h, un Porsche 911 Carrera S Cabrio a casi 280 km/h, y finalmente a un Lamborghini Gallardo Spyder a más de 300 km/h.
YouTube - Speed Test 300 km/h