El día que… los pilotos italianos se aliaron contra Hans Spaan

Tema en 'Moteros BMW FAQ Club' iniciado por KORANDO, 1 Oct 2022.

  1. KORANDO

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    Ahora que se habla de alianzas y órdenes de equipo a favor de Pecco Bagnaia frente a Fabio Quartararo, recordemos cómo se las gastaron los pilotos italianos en 1990 ante Hans Spaan.
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    Loris Capirossi (65) intenta escapar mientras Hans Spaan (2) está rodeado de italianos
    Esto de las alianzas y las órdenes de equipo en el mundo de las carreras siempre es una cuestión complicada, porque partimos del hecho de que se trata de un deporte individual, pero no podemos eludir que el piloto, que es quien se lleva la gloria, lo que hace es rematar el trabajo de una larga cadena de personas. Y en último término, es el piloto, con su habilidad y su talento, quien culmina la obra. Los pilotos son la herramienta y el reactivo, son los héroes y los villanos también.

    Se ha iniciado ya un debate en MotoGP sobre qué papel tienen que jugar los otros pilotos de Ducati en las aspiraciones de Pecco Bagnaia al título. Él es el piloto de la marca mejor colocado, pero Enea Bastianini también tiene opciones, aunque más remotas, y lógicamente quiere jugarlas. Además, cuenta con un jugoso bono como incentivo, establecido por Ducati antes de que comenzara la temporada, y podría llegar a duplicar su cuantía su superara a Bagnaia en la clasificación final del campeonato. Y estamos hablando de dos pilotos que van a ser compañeros de equipo las próximas temporadas…


    En Ducati no quieren que haya fuego amigo en el desenlace del Mundial, no vaya a ser que el uno por el otro y la casa sin barrer… Porque, sobre el papel, lo lógico es que se estableciera una alianza entre los pilotos de Ducati para jugar a favor de Bagnaia y en contra de Fabio Quartararo, solitario contendiente en la lucha por el título de MotoGP a lomos de su Yamaha. Él está aún más solo que Aleix Espargaró, que es el tercer aspirante, que al menos cuenta con un muy competitivo Maverick Viñales para echarle un cable. Pero a Quartararo, ¿quién le puede ayudar? Desde luego que nadie de su marca.


    La lógica que le gustaría imponer a Ducati es un orden que permita restar puntos a Quartararo de aquí a final de año. Ya se ha visto en entrenamientos, donde las Ducati, aprovechando su superioridad numérica, han poblado las primeras posiciones de la parrilla, aunque el buen hacer de Quartararo le ha permitido capear el temporal. En cualquier caso, si alguien no enloquece, lo normal es que la alianza italiana termine arrollando al francés. No sería la primera vez que sucede…

    COSA NOSTRA
    No es fácil poner de acuerdo a mucha gente cuando cada uno tiene intereses dispares. Hay cuatro equipos Ducati con diferentes objetivos y aspiraciones. A veces, aunque se trabaje con la misma marca desde formaciones distintas, el que se acepte un objetivo común depende más de las personas que de las órdenes. Dicen que la nobleza de Barry Sheene permitió que este renunciara a la victoria en Assen en 1979 en favor de Virginio Ferrari, que era contendiente directo con Kenny Roberts en la lucha por el título. Ese triunfo de Ferrari, por solo 10 centésimas sobre Sheene, permitió al italiano colocarse líder del Mundial de 500. Uno corría para Heron y el otro para Gallina, pero los dos eran pilotos de Suzuki y el enemigo estaba en una Yamaha. Parece que todo el mundo lo tenía bastante claro.


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    Spaan (2), Capirossi (65) y Prein (7) se jugaron el título en Australia
    Eso mismo sucedió en 1990 en Phillip Island, en el desenlace del Mundial de 125 al que llegaban tres pilotos de Honda muy igualados entre sí: lideraba Stefan Prein, con 169 puntos; Hans Spaan era segundo con 165; y el jovencísimo de 17 años Loris Capirossi era tercero, con 162. Con tan escasa diferencia entre ellos solo había una estrategia: salir a ganar.


    Pasara lo que pasara en el circuito australiano el título iba a ser para Honda, que campaba a sus anchas en el campeonato tras la crisis de JJ-Cobas mediada la temporada –Aspar llegó a liderar esa temporada tras su tercera victoria en Austria pero ya no regresó al podio-, la falta de capacidad de Gramigni y Aprilia, y la deserción de Derbi, por su nula competitividad. La lógica imponía que se las apañaran entre los tres aspirantes, pero los pilotos italianos decidieron hacer piña y jugar a favor del joven Capirossi, en una de las carreras más vibrantes y emocionantes que se recuerdan, pero también más antideportiva.

    Si se repitiera una situación semejante en la actualidad, no quiero ni pensar lo que llegaría a decirse en las redes sociales, que seguramente se pondrían a punto de ebullición… Pero regresemos a 1990 y pongámonos en contexto. O como decía la adorable ancianita de Las chicas de oro, Sicilia 1934… porque aquel GP de Australia fue, verdaderamente, un asunto de la Cosa Nostra.

    TODOS CONTRA SPAAN
    Capirossi, que venía de ganar dos de las cuatro últimas carreras, como Spaan, tenía clara que su estrategia era el ataque, y casi desde la salida se escapó, tras un breve liderato de Gramigni. Se montó un buen pelotón de once pilotos, el clásico desarrollo de carrera de Phillip Island. Pero en la segunda vuelta, sorpresa: ¡Prein entre en el pit lane con el reenvío de la palanca del cambio roto! Alguien no debió estar muy atento al control de calidad en la línea de producción de Honda, porque apenas hora y media después le sucedería lo mismo a Carlos Cardús en su Honda NSR 250…



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    Capirossi lidera frente a Spaan.
    El caso es que el título iba a quedar entre Spaan y Capirossi, que decide saltar del grupo y escapar. Gresini, Spaan, Casanova y Romboni se van con él, y a partir de ese momento se organiza un formidable casino –el término que se utiliza en Italia para denominar lo que nosotros llamamos follón-, en el que el objetivo fundamental es que Spaan no supere a Capirossi y ni siquiera pueda ser segundo, porque a igualdad de puntos se imponía el holandés por mayor número de victorias.

    Lo que sucedió a partir de ese momento fue una antología de la antideportividad. Gresini, compañero de Capirossi en el Team Pileri, se abría paso con todo en cuanto Spaan se colocaba segundo. Comparado con él en aquella jornada, el Márquez más salvaje es un niño de pecho. Tan desesperado se vio Spaan que llegó a lanzar un puñetazo a Gresini. Y a pesar de todo, el holandés fue capaz de cazar a Capirossi y ponerse en cabeza, llegando a ser, virtualmente, campeón del mundo.

    Pero “noventa minuti sul Bernabeu son tropo longi”… Los italianos no cesaron en su empeño y volvieron a la carga, hostigando a Spaan en cada maniobra, metiéndole rueda en cada curva, estorbando, como una organizada manada de hienas que pretende cobrarse una presa complicada. Consiguieron que Capìrossi recuperara la primera posición y a partir de ese momento volvieron a la carga, con maniobras más que discutibles, y con Gresini haciendo que Spaan volviera a perder los nervios. El holandés golpeó de nuevo al italiano en un gesto de desesperación, porque pasaban las vueltas y Capirossi cobraba ventaja protegido por su guardia pretoriana. El jovencísimo Loris ganó y se hizo con el título, convertido en el campeón más joven de la historia, acompañado en el podio por Casanova y Romboni. Spaan fue cuarto, por delante de Gresini.


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    Loris Capirossi campeón del mundo con 17 años
    A Spaan de nada le sirvieron las quejas. La Dirección de Carrera –por si alguien se queja, todavía no estaba Dorna- no encontró nada punible que señalar. “Ha sido una carrera difícil, muy difícil, pero eso lo sabía antes de salir”, decía Spaan. “Imaginaba que los italianos no me iban a dar facilidades, pero lo de Gresini ha sido demasiado (…). Se puede hacer labor de equipo, pero no de esta forma”, se quejó el holandés.

    Lógicamente, Gresini vió la película de otra manera: “Capirossi es compañero de equipo y necesitaba ayuda. ¿Qué he hecho una carrera dura? Si hay un hueco se aprovecha; lo que está claro es que no iba a hacer concesiones”, dijo el italiano. Este mensaje sigue siendo vigente hoy, y nos recuerda que en la pista no solo hay dos –o tres- pilotos jugándose el título, que los otros veinte que salen a carrera también pelean por lo suyo, sea lo que sea.

     
    A marrero1970 y SP_Kenny les gusta esto.

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