Amphicar, Anfibio de Cuatro Ruedas En 1961 se presentó uno de los vehículos más originales e interesantes que se han fabricado en el mundo. Podía transitar por las carreteras, por el agua y además era un descapotable. El modelo fué presentado como prototipo en el Salón de Ginebra de 1959, y dos años después era toda una realidad. Fue producido entre 1961 y 1968, en la planta de la ACV Amphicar Vertriebsgesellschaft en Berlín Alemania. El diseño del novedoso y polifuncional vehículo, era creación del ingeniero alemán Hans Trippel (1908-2001). Utilizaba un motor británico de 4 cilindros enfriado por agua, que se montaba atrás y tenía una potencia de 43 HP/ 4.750, y era el mismo utilizado en el Triumph Herald. Este se acoplaba a una caja de cambios Hermes, similar a las utilizadas por Porsche, pero con la particularidad de tener 4 cambios para transitar en tierra y 2 específicos para los cruceros en el agua. El Amphicar tenía dos hélices montadas en la parte trasera, debajo de la defensa, que se utilizaban exclusivamente en sus expediciones acuáticas. En carretera alcanzaba una velocidad máxima de 120 Km/hora y en el agua de unos 15 Km/hora. Su carrocería de 2 puertas convertible, fabricada en acero y totalmente impermeable, se ofrecía únicamente en 4 colores : Rojo, blanco, azul y verde. Pesaba 1.050 kilos, su largo total era de 4.3 metros . Como dato interesante conviene mencionar, que en el agua, sus ruedas delanteras funcionaban como timón. El 16 de septiembre de 1965, dos Amphicar tripulados por los capitanes de la armada británica Peter Tappenden, Michael Bailey y el sargento Joe Minto, acompañados por Timothy Dill-Russell propietario de uno de los vehículos, cruzaron el canal de la mancha entre Dover y Calais en 7 horas y 20 minutos. Un intento similar no tuvo un final feliz, ya que un Amphicar fue chocado y hundido por un gran barco, cuando se intentaba cruzar el estrecho de Gibraltar entre Europa y África. Durante los siete años de producción, se fabricaron 4.500 Amphicar, de ellos 3800 fueron exportados a Estados Unidos, donde pese a costar entre 2.800 y 3.300 dólares un precio muy alto para el momento, fueron un éxito. En 1968, el Gobierno norteamericano impidió la importación de algunos vehículos, entre ellos el Amphicar. Esto trajo consigo la muerte del modelo, ya que en ese momento el 90% de la producción estaba destinada al mercado de los Estados Unidos. La empresa ahogada por las deudas y ante la imposibilidad de vender en su mercado más importante, se vio obligada a vender su factoría al grupo Quandt, propietario de un buen porcentaje de las acciones del gigante BMW. Finalmente sus nuevos dueños pensaron en producir 20.000 unidades al año, lo que nunca se llevó a cabo. Actualmente la fiebre por el Amphicar se mantiene viva especialmente en los Estados Unidos. Allí existen unos 500 clubes del modelo, que realizan encuentros, paseos y convenciones. De los 4.500 Amphicar producidos, se calcula que subsisten unos 800, a los cuales sus dueños les prodigan toda clase de cuidados. El precio actual de un Amphicar en perfecto estado, ronda los US$60.000.
